La electroterapia es un tratamiento fisioterapéutico que utiliza la corriente eléctrica para estimular zonas del organismo afectadas por el dolor nervioso, inflamaciones, músculos atrofiados y lesiones osteomusculares.
La electroestimulación es una técnica que se utiliza desde hace muchos años y de manera muy amplia en los sectores de la rehabilitación, y más recientemente, en la estética y el fitness. A través del uso de dispositivos que envían impulsos eléctricos a los músculos, se provocan contracciones musculares y como consecuencia un efecto similar al que se obtendría ejercitando los músculos.
Sin lugar a dudas, la amplia experiencia demuestra que la electro estimulación funciona y los resultados que nos ofrece no admiten dudas respecto a su utilización.
Electroestimulación y sus funciones.
El significado es bastante claro: uso de la electricidad en el tratamiento de enfermedades. Consiste en la aplicación de determinados estímulos físicos generados por una corriente eléctrica, que consigue desencadenar una respuesta fisiológica, que va a provocar un efecto terapéutico.
Dentro de la electroterapia podemos encontrar diferentes tipos de aplicación de la electricidad:
– Electro estimulación
– TENS
– Iontoforesis (corriente galvánica)
– Microondas
– Ultrasonidos
Cada uno de estos tipos de aparatos se aplicará según las necesidades del paciente. Los efectos que se consiguen con la corriente eléctrica son la producción de calor, el efecto magnético y el electroquímico.
Normalmente el fisioterapeuta utiliza la electroterapia para reducir o eliminar el dolor (sedante, analgésico), como técnica antiinflamatoria o para mejorar la actividad muscular. Veamos las funciones que tienes estos aparatos de electroterapia.
Electro estimulación
Los electro estimuladores musculares (EMS), que tienen dos funciones muy importantes dentro de los procesos de rehabilitación: el programa TENS y los programas para evitar la atrofia muscular y ganar fuerza. A través de unos electrodos colocados en la piel se transmite la corriente eléctrica a la zona elegida.
El TENS (Transcutaneous electrical nerve stimulation, electroestimulacion transcutánea de los nervio) es un programa de electroterapia a baja frecuencia. Su función principal es disminuir el dolor de una zona determinada, lo que no queda claro a día de hoy es si lo hace mediante la producción de endorfinas o consigue un bloqueo de las fibras nerviosas a nivel medular, evitando que el dolor llegue al cerebro.
Los programas de estimulación muscular sirven para recuperar la capacidad contráctil del musculo que tiene disminuida su fuerza, derivada por una lesión o periodo de inactividad.
La electroterapia tiene algunas contraindicaciones como es la presencia de quemaduras en la piel, llevar marcapasos o alguna placa de metal o tornillo para fijar una fractura o estar embarazada.
Iontoforesis
Es de las técnicas más desconocidas de la fisioterapia. Consiste en la introducción de sustancias a través de la piel (normalmente, medicamentos), utilizando la corriente continua (galvánica). Es importante conocer la polaridad del medicamento, para que coincida con la del electrodo. Suele usarse en lesión de tejido blandos (músculos, tendones) con el objetivo de evitar el dolor. Es una técnica poco utilizada, dado que la farmacología actual es más efectiva.
A nivel de precauciones, las personas con marcapasos, DIU, placas metálicas deben evitar su uso.
Microondas
Otro de los aparatos más conocidos y utilizados de la electroterapia. Su función es la de proporcionar calor en tejidos profundos (a diferencia de los infrarrojos que dan calor superficial), dejando una leve sensación de calor en zona superficiales como la piel. Se puede regular la intensidad en función del tejido a tratar. Su uso debe ser muy cuidadoso ya que tiene algunas contraindicaciones: deben evitar su uso personas con prótesis o material de osteosíntesis metálica, personas con marcapasos y mujeres embarazadas (el calor puede alterar la gestación).
Ultrasonido
Podríamos decir que es el aparto estrella, junto con la electro estimulación, de la electroterapia. Su función es la de actuar como antiinflamatorio de tejidos blandos con poco grosor cercanas al hueso: tendones, fascinas de músculos planos, bursitis, capsulitis… Las contraindicaciones son parecidas a las del microondas: evitar la aplicación en gónadas, dispositivos intrauterinos y aplicación con precaución en zonas con material de osteosíntesis.
Una vez vistos diferentes aparatos de electroterapia, podemos concluir a modo de resumen que estos aportan los siguientes beneficios:
– Relajante. Al provocar un efecto analgésico, reduce el dolor en la zona a tratar.
– Antiinflamatorio. La electroterapia ayuda en el aumento del aporte sanguíneo, provocando una vasodilatación, que mejora la recuperación de los tejidos.
– Circulatorio. Ayuda a mejorar la circulación sanguínea en la zona del tratamiento.
La revolución de los equipos de electroestimulación integral o global
En el ámbito de la rehabilitación, puede ser suficiente trabajar con equipos de electroestimulación de un solo grupo muscular, ya que, en la mayoría de casos, se necesita estimular una zona concreta: la zona donde se ha producido la lesión.
Sin embargo, en el momento que queremos una aplicación estética o deportiva, es necesario actuar sobre el máximo número de zonas posibles a la vez.
Desde hace unos diez años, han aparecido los dispositivos de electroestimulación global o integral. Estos dispositivos de electroestimulación global
permiten trabajar varios grupos musculares a la vez y nos acelera aún más, si cabe, la obtención de resultados. Llegando a los objetivos en un periodo más corto de tiempo.
¿Por qué funciona la electroestimulación muscular?
La electro estimulación provoca excitar más fibras musculares de las que podemos reclutar cuando lo hacemos de manera convencional. De este modo, la conversión de grasa en músculo es mucho mayor cuando trabajamos con electro estimulación.
Al ocupar la grasa mucho más espacio que el músculo, la reducción de volumen es muy constatable y podemos afirmar que el uso de la electro estimulación provoca cambios evidentes.
Todos estos aspectos positivos que nos aporta la electroestimulación se pueden complementar, por supuesto con una dieta para obtener el tratamiento de belleza ideal, con un objetivo de perder peso.
También, para ponerle la cereza al pastel, podemos añadir un gel reductor durante la aplicación de la electroestimulación.
El origen de la electroestimulación muscular
Como muchos de los avances tecnológicos, la electroestimulación tuvo su desarrollo como método de estimulación e incluso como posible tortura en las confrontaciones bélicas.
La evolución de los productos y la adaptación de la electroestimulación a los diferentes sectores comentados: medicina / rehabilitación; estética y deporte, han conseguido que en nuestros tiempos todos los dispositivos de electro estimulación están perfectamente controlados y sean seguros, utilizando sólo una ratio de corriente que sólo provoca ganancias sin provocar ningún daño.
La fabricación y desarrollo de los chalecos y trajes de electro estimulación global con electrodos no ha hecho más que aumentar la reputación de que la electro estimulación funciona.
¿Cómo funciona la electroestimulación muscular? Las distintas formas de trabajar el músculo según la frecuencia aplicada
La electroestimulación funciona y se puede usar con diferentes objetivos. Variando la frecuencia de trabajo, se consiguen resultados diferentes.
Cuando trabajamos con frecuencias más bajas, o sea a menos contracciones por segundo, utilizamos la electro estimulación como método para relajar la musculatura, digamos que trabajando con frecuencias entre 1 y 10 hercios conseguimos que se liberen endorfinas, elevamos el umbral de dolor, aumentamos la vascularización y la relajación.
Cuando la electro estimulación funciona entre 10 y 20 hercios mejoramos la oxigenación de los tejidos, capacidad de trabajo de la musculatura tónica (hasta 30hz) se mejora la musculatura estabilizadora.
Cuando la electro estimulación funciona entre 20 y 50 hercios, ejercitaremos las fibras mixtas, estimularemos el músculo de manera global para la mejora del tono y la resistencia a la fuerza. En estas frecuencias la electro estimulación funciona en las primeras fases de rehabilitación.
Cuando la electro estimulación funciona entre 50 y 150 hercios, se trabaja la musculatura fásica, por otra parte, entre 40 y 80 hercios, trabajaremos la fuerza resistencia y la hipertrofia muscular, entre 80 y 100 hercios entrenaremos la fuerza máxima y a partir de 100 hercios la electro estimulación funciona para aumentar la potencia, con lo cual aumentaremos la capacidad de ser más rápidos con más fuerza.
La aplicación de la electroestimulación al deporte
Conociendo los datos anteriores, ya podemos intuir que la aplicación de la electroestimulación en el ámbito del deporte es más que evidente.
Gracias a sus amplias posibilidades, la electroestimulación global deportiva se usa en un rango de personas muy amplio:
Desde personas sedentarias o personas mayores – la electroestimulación se puede usar para tonificar-. hasta deportistas profesionales, que usarán la electroestimulación global para aumentar la potencia muscular. La electroestimulación deportiva consigue optimizar tu musculatura.
Con apenas 20 minutos semanales se consigue el tono y la firmeza necesaria para todos los grupos musculares.
No se necesita una forma física previa específica, por lo que puede ser muy eficaz en personas mayores, siempre con un programa adecuado y un volumen de entrenamiento controlado para, poco a poco, ir aumentándolo en función del estado de forma del sujeto en cuestión.
Si trabajamos de forma estática o en isometría, la electro estimulación funciona genial en personas con problemas de movilidad, el riesgo de lesionarse es mínimo.
La electroestimulación funciona en la estética: adelgazante y anticelulítico
En el caso de los tratamientos de estética, le electro estimulación funciona como tratamiento adelgazante, ya que, gracias a la intensidad que obtenemos en cada sesión de electro estimulación, conseguimos que haya un consumo calórico muy superior al que conseguiríamos con un entrenamiento convencional. Este cambio de forma de entrenar nos aporta unos resultados espectaculares.
A su vez, también mejora ostensiblemente el aspecto de la piel y nos ayuda en la eliminación de la celulitis, aumentar el tono muscular y así mejorar la flacidez de la piel.
